La preboda siempre es una buena excusa para quitarse los nervios de encima, dejarse llevar y crear un bonito reportaje previo al día de la boda, pero esta preboda en el Castillo de Tamarit además sirvió para recorrer los espacios donde tendría lugar la boda de Sissi y Jordi.
Y todo fue por casualidad, ya que nosotros simplemente estábamos por los alrededores de la zona haciendo las fotografías de la preboda y al final esta se acabó convirtiendo en una preboda en el Castillo de Tamarit.
Y es que resulta que mientras nosotros estábamos paseando vimos como había un grupo de gente esperando en las puertas del Castillo y fuimos a cotillear y al final conseguimos acceder y poder recorrer todos los rincones del Castillo, lugar donde poco tiempo después tendría lugar su boda.
Siempre digo que lo principal en las prebodas es dejarse llevar, que se donde vamos a empezar pero no como ni donde vamos a acabar, que todo eso lo marca el momento in situ, y esa es la verdadera esencia, pues la preboda esta hecha para disfrutar y pasárselo bien y, como a cambio de eso, sacar una increíbles fotografías.
Imagino que si me sigues desde hace tiempo ya conocerás este lugar, pero es la primera vez que hago una preboda en el Castillo de Tamarit y quiero enseñártelo desde otra perspectiva.
Espero que te guste tanto como a mi, ¡disfruta del reportaje!